
El restaurante Ríos O Freixo tiene algo de japonés. No nos confundamos, no se dedican al ramen ni al sushi. El aire nipón le viene dado por una estética y una forma de trabajar que rehúye de cualquier tipo de artificio. Desde la vestimenta hasta la decoración del local, todo está encaminado a evitar distracciones. Cuando se pone tanta atención en los detalles, no estamos hablando de algo casual: el restaurante Ríos apunta directamente a la esencia de las cosas.
La definición de la carta también se mueve por los mismos derroteros: mariscos, pescados, arroces y postres. Ideas claras.


Situado en la fachada del muelle de O Freixo (Outes), tiene en los productos Km. 0 su razón de ser. El mar es su despensa inmediata. Las lonjas de Ribeira, Muros y Fisterra les proveen de pescados, la propia lonja de O Freixo les aporta mariscos -entre ellos, las ostras, que son una de las bases de su cocina- e inevitablemente los mejores berberechos del mundo. La lonja de Lira también es visitada por los hermanos Ríos para adquirir hermosas nécoras y grandiosas centollas. Todo ello a menos de 100 kilómetros de su cocina, como bien reza el precepto Km. 0 de MarGalaica, un marchamo de calidad, de frescura e incluso de respeto por el medio.

Los hermanos Ríos nos dicen que cocinan lo que trae la marea. Y lo hacen con absoluta precisión. Utilizan una expresión que nos fascina: “milimetrando el punto de cocción”. De nuevo asoma la perfección nipona.
Fernando y Domingo aportan su conocimiento a los mejores productos de la gran despensa marina. Cuando te enfrentas a materia prima de tan alta calidad, estás obligado a poner todo de tu parte para no quedar atrás. Tienes que perfeccionarte al máximo. Aprovechar lo mejor que trae la marea. Contar siempre con los productos de temporada. Estar atento a los ejemplares más hermosos.

Y mantener la tradición sin rechazar la innovación. Eso sí, sin tomar riesgos: apostando sobre seguro. Un ejemplo, en su carta de hoy encontramos tres propuestas de zamburiñas: las tradicionales a la plancha, otras aderezadas con algo tan gallego como una salsa de vino albariño y unas terceras zamburiñas, más sorprendentes, acompañadas con verduritas y tocino ibérico. ¿Cuántas veces habrán practicado la receta Fernando y Domingo hasta considerarla merecedora de sus clientes? Solo ellos lo saben.
Todo esto tiene premio: la reciente concesión de un Sol Repsol ha sido el suyo. Enhorabuena!
Exactitud. Perfeccionamiento. Realmente el Restaurante Ríos es un alarde de cocina gallega, pero con el estilo de los mejores restaurantes japoneses. Una delicia para los sentidos.

